Osmosis inversa y desmineralización, dos sistemas para obtener agua pura
Limpieza con respeto al medio ambiente
Se conoce como agua pura aquella que no contiene ningún tipo de minerales ni partículas en su composición. En los últimos años, el agua pura se ha convertido en una gran aliada para llevar a cabo la limpieza de cristales en altura, puesto que gracias a su inestabilidad molecular, actúa como un imán que atrae cualquier tipo de residuos orgánicos e inorgánicos hasta su total saturación. Además de su alta eficiencia como agente limpiador, el agua pura permite desarrollar las labores de limpieza respetando el medio ambiente, sin la necesidad de utilizar los tradicionales productos químicos.
Hoy en día, existen dos métodos principales para la obtención de agua pura: la desmineralización y la osmosis inversa.
La desmineralización se realiza mediante un intercambio iónico haciendo uso de una resina de lecho mixto. El agua cargada de minerales pasa a través de esta resina especial, dando lugar a un proceso químico que elimina todos los minerales que contiene. Sin embargo, llega un momento en el que la resina queda saturada y es necesario cambiarla pues ya no permite más intercambio iónico para la obtención de agua pura.
Al contrario de la desmineralización que requiere de un proceso químico, la osmosis inversa se trata de un sistema de filtrado físico que se realiza mediante unas membranas. Estas membranas son unas láminas fabricadas con distintos materiales plásticos y enrolladas en forma de espiral. Cuando el agua atraviesa estas capas se obtiene agua pura al 95%. Para llegar al 99% de pureza, los sistemas de osmosis incorporan además un pre-filtrado y un post-filtrado del agua.
Uno de los métodos más eficaces para realizar la limpieza de cristales en altura consiste en la utilización de pértigas de fibra de carbono con una inyección continua de agua osmotizada. El extremo de estas pértigas está equipado con un cepillo de cerdas naturales que, combinado con la inyección de agua osmotizada, permite arrastrar toda la suciedad que encuentra a su paso dejando los cristales impecables.
Este novedoso sistema está especialmente indicado para la limpieza de grandes superficies acristaladas exteriores. No obstante, también sirve para limpiar otros tipos de superficies como aluminios, chapas, acero, carteles vinílicos o paneles solares.
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